REFRANERO ESPAÑOL

   Refranes, refranes, refranes, conozco varios refranes que he utilizado a lo largo de mi vida, por ejemplo, de pequeña cuando una compañera de clase se metía conmigo yo le decía ''a palabras necias oídos sordos'', al principio me costaba decirle nada, pero mi padre me enseño esa frase bastante útil, pues ni siquiera tienes que escuchar que es lo que te va a decir para pensar en que contestar, simplemente soltabas el refrán y seguías hacía delante, tan feliz. También ha estado presente en mi vida la frase ''Quien madruga, dios le ayuda'' pues siempre que me quejaba porque tenía sueño y no me quería levantar, ahí estaba mi padre con su refranero. ''A buenas horas, mangas verdes'' decimos en mi familia siempre que alguien llega tarde, ya más que un refrán nos parecía una frase que debías aprender nada más nacer, con el tiempo te dabas cuenta de que la hora no tiene nada que ver con unas mangas y menos de un jerséis verde jaja, entonces te dabas cuenta de que no era una frase familiar, sino un refrán español, ello indicaba que ya estabas en la edad del uso de tu razón. Por último recuerdo cuando decían ''a caballo regalado no le mires el diente'', no daban tiempo a que pronunciaras la primera palabra para quejarte de algo, que no te gustaba o que estaba desgastado porque te lo regalaba un amigo de un amigo, que ya estaban ellos diciendo otro refrán tan útil de nuestro país para evitar escuchar tu queja.
 
   El refranero español es algo maravillo, la verdad es que llevo toda la vida utilizando frases hechas sin pensar en lo que realmente estaba diciendo, hasta hoy, que he decidido mirar el refranero español, pues algo tan útil merece nuestra atención.
 
   Aquí os dejo mis refranes preferidos, imagino que los conoceréis, y si no es así os recomiendo que los busquéis, pues son estupendos. Si queréis podéis comentarme vuestras anécdotas del refranero, pues alguno recordaréis que merezca la pena comentar. Disfrutadlo. 
 
-A buen entendedor pocas palabras bastan.
-A falta de pan, buenas son tortas.
-A grandes males, grandes remedios.
-A la cama no te irás sin saber una cosa más.
-A la tercera va la vencida.
-A lo hecho, pecho.
-A mal tiempo, buena cara.
-Agua pasada no mueve molino.
-Como éramos pocos, parió la abuela.
-Cuando las barbas del vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar.
-De tal palo tal astilla.
-Vísteme despacio que tengo prisa.
 
 

 

   ¿Cuál es tu preferido?